BIBLIOGRAFÍA: Citas de la «N»

 

La Nada

“La solución del lado del ser consiste en no colmar el agujero, sino en metabolizarlo, y en ser el agujero. Es decir fabricarse un ser con la nada.”

Miller J.-A., De mujeres y Semblantes, en Cuadernos del Pasador 1, Bs. As., 1994, p. 88.

Cita señalada por Rosa Mª Calvet i Romaní (BCFB)

Narcisismo del deseo

“En la posición de o bien-o bien en que el sujeto se encuentra atrapado entre una pura ausencia y una pura sensibilidad, no debe asombrarnos que el narcisismo del deseo se aferre inmediatamente al narcisismo del ego que es su prototipo.

Que unos seres insignificantes estén habitados por una dialéctica tan sutil, es cosa a la que el análisis nos acostumbra, y que explica que el menor defecto del ego sea su trivialidad”.

Lacan J., Ideas directivas para un congreso sobre la sexualidad femenina, Obras Escogidas, Tomo 1, RBA, Barcelona 2006, p.712.

Cita señalada por Carmen Cuñat (Madrid)

“Si la máscara del narcisismo mundano del ego es común en ambos sexos, lo que es particular de la posición femenina es el narcisismo del deseo que está más allá del amor del deseo, una forma de deseo de deseo que va a nombrar, más allá del falo, la salida femenina”.

Laurent E., El sujeto de la ciencia y la distinción femenina. Conferencia pronunciada en las XXI Jornadas anuales de la EOL, La clínica de lo singular frente a la epidemia de las clasificaciones. Bs. As., diciembre de 2012 y publicada en la revista LETRAS nº 8.

Cita señalada por Maite Esteban (BOL Málaga)

Narcisismo y niño

“Aun para las mujeres narcisistas, las que permanecen frías hacía el hombre, hay un camino que lleva al pleno amor de objeto. En el hijo que dan a luz se les enfrenta una parte de su cuerpo propio como un objeto extraño al que ahora pueden brindar, desde el narcisismo, el pleno amor de objeto”.

Freud S., Introducción al narcisismo, Vol. 14, O.C. Amorrortu. Buenos Aires, 1992, p.86.

Cita señalada por José Ángel R. Ribas (BOL Sevilla)

Niño falo

“En el mismo punto (…) el del enfoque de Freud de la metáfora sexual niño = falo) conviene preguntar si la mediación fálica drena todo lo que puede manifestarse de pulsional en la mujer y principalmente todo la corriente del instinto materno”.

Lacan, J., Ideas directivas para un congreso sobre la sexualidad femenina, (1960) Escritos. I, Siglo XXI editores, pp. 294- 295.

Cita señalada por la BOL Vigo

Niño a

“El niño realiza la presencia, a la vez que da cuenta de ella, de eso que J. Lacan designa como objeto ‘a’ en el fantasma. (…) En una palabra, el niño, en la relación dual con la madre, le da, accesible sin mediación, lo que le falta al sujeto masculino: el objeto mismo de su existencia, apareciendo en lo real. De ello lo que resulta es que, cuanto más real hace presente, mayor es el soborno al que está entregado en el fantasma”.

Lacan J., Nota sobre el niño (1969) Otros Escritos, Paidós, Bs. As., 2012, pg. 393.

Cita señalada por la BOL Vigo

La No relación sexual

“El –φ es el vacío de la vasija, la misma que define al Homo faber. Mientras que la mujer es primordialmente una tejedora, el hombre, sin duda, el alfarero. Incluso ya sólo por este lado, en la especie humana, tiene fundamento aquel estribillo, como nos dicen, ‘el hilo es para la aguja como la chica para el muchacho’. Referencia que pretende ser natural. No es tan natural. La mujer se presenta, sin duda, con la apariencia de la vasija, y evidentemente es esto lo que engaña al partenaire, al Homo faber en cuestión, el alfarero. Él se imagina que esta vasija puede contener el objeto de su deseo”.

Lacan, J., El Seminario, Libro 10, La angustia, Paidós, Bs. As., 2006, p. 221.

Cita señalada por Rosa Mª Calvet i Romaní (BCFB)

“Tiene una validez en el sentido de que hombre y mujer son dos razas –tal es la posición de Lacan– no biológicamente, sino en lo que hace a la relación del inconsciente con el goce. El hecho de que pueda apoyarse en una determinación anatómica, sobre todo cuanto se verifica genéticamente, empujaría más bien a hablar de complementariedad, pero a nivel de la relación inconsciente con el goce está lo que llamamos sexuación. En este nivel se trata de dos modos de goce”.

Miller J.-A., Extimidad, Paidós, Bs. As., 2010, pp. 55-56.

Cita señalada por Rosa Durá (BOL Valencia)

“Un l.o.m.b.r.e. no es el hombre, ni es tampoco el sujeto dividido representado por el significante. Es el inconsciente anudado al síntoma. Un género tachado, LA/ mujer, y otro género sin sentido, un l.o.m.b.r.e (traducción del neologismo l.o.m.), constituyen la rectificación analítica de la oposición entre la mujer y el hombre. No porque reemplacen a dicha oposición ni porque la superen, sino porque, como en un chiste, la duplican”.

Alemán J. y Larriera S., Lacan : Heidegger. Miguel Gómez Ediciones, Málaga, 1998, p. 183.

Cita señalada por Gracia Viscasillas (BOL Zaragoza)

“El discurso dominante, organizado por los ideales de igualdad, produce efectos en la relación entre los sexos. Cuando la mujer ya no es el objeto, el hombre no tiene el auxilio de la potencia que le garantizaba la posición femenina en el fantasma. Si la mujer no es objeto, es sujeto, y en el encuentro entre los sexos pére-versamente orientado, se torna problemático”.

Fernández Blanco M., Violencia sexual y femicidio, conferencia pronunciada en el ciclo de conferencias sobre Formas contemporáneas de la violencia. Organizada por el ICF- Alicante el 17 de enero de 2014 y publicado en la revista LETRAS nº 8.

Cita señalada por Maite Esteban (BOL Málaga)

Por el contrario, si se pueden oponer el hombre y la mujer es más bien como lo Mismo y lo Otro”.

Miller, J.-A., Divinos detalles, Paidós, Bs. As., 2010. pp. 103.

Cita señalada por José Manuel de Manuel (BOL Castilla y León)

“(…) la ideología igualitaria y contractual hace del hombre y la mujer sujetos intercambiables (…) la ventaja de entenderlo todo en función de las relaciones de dominio beneficia a sometidos y opresores en la evitación de la angustia que implica confrontarse con la dimensión propiamente sexual de la relación con el otro”.

Barros M., La Condición femenina, Bs. As., ed. Grama, 2011, p.53.

Cita señalada por Beatriz García (BOL Madrid)

El No-todo

“(…) el régimen del no todo es la serie. Es un régimen que no responde a la figura del conjunto sino a la figura de la serie, de la serie que se prosigue sin ley y que requiere que nos interesemos en cada uno”.

Miller J.-A., Piezas sueltas, Paidós, Bs. As., 2013. p. 297.

Cita señalada por Maite Esteban (BOL Málaga)

«Para resumir los rasgos fundamentales de esta orientación (la lacaniana), diremos que más allá de la lógica fálica, donde el único significante que existe para marcar la diferencia de los sexos es el significante del falo, la pregunta de la feminidad y del goce femenino abre el campo del goce del Otro, del goce como alteridad, donde funciona otra lógica. Se trata de una lógica no dicotómica, no binaria, que no permite construir un conjunto cerrado o un Todo universal, sino que funciona como un No-todo que deja el conjunto en estado abierto y obliga a considerar sus elementos uno por uno, sin una definición previa que valga para todos».

Bassols i Puig M., Lecturas de la página en blanco. La letra y el objeto. Miguel Gómez Ediciones, Málaga, 2011.

Cita señalada por Enrique Gómez Crespo (BOL Castilla y León)

“El verdadero sentido del no-todo lacaniano, que no está hecho de ningún modo para instalar una reserva, un límite, una frontera, más allá de lo cual habría trasgresión. Con el no-todo, precisamente, no hay trasgresión”.

Miller J.-A., El partenaire-síntoma, Paidós, Bs. As., 2008. pp. 279.

Cita señalada por María del Carmen Reguilón (BOL Castilla y León)